viernes, 25 de septiembre de 2015

LA PROMESA DEL ESPÍRITU SANTO: Parte I


Antes de ascender al cielo, el Señor Jesús les dio ciertas instrucciones a los discípulos, registradas en Lucas 24:49 y en el capítulo 1 de Hechos, que dicen así:

“He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros;
Pero quedaos vosotros en la ciudad de Jerusalén,
Hasta que seáis investidos de poder de lo alto.” (Lucas 24:49)

Hechos 1:4-5 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo oísteis de mí.
Porque Juan ciertamente bautizó con agua, más vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos días.

Según la orden que el Señor les dio a los discípulos, ellos se tenían que quedar en Jerusalén a esperar la promesa del Padre…Ahora la pregunta que surge es:

¿Cuál fue la promesa que Dios les había hecho a los discípulos por intermedio del Señor Jesucristo? 

La promesa del Espíritu Santo

En Juan 14: 16-17,26, el Señor Jesús les dijo a los discípulos:
16- Y yo rogaré al Padre, y os dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre:
17- el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le conoce, pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros y estará en vosotros.

26- Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todo lo que yo os he dicho.

En Juan 15: 26 otra vez la misma idea
26- Pero cuando venga el Consolador, a quien yo enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, el dará testimonio acerca de mí.

De acuerdo a estos pasajes de la Biblia interpretamos que la promesa del Padre consistió en que Dios enviará el Espíritu Santo sobre los discípulos para que habite en sus corazones.

En la versión de la “Biblia al Día”, de Hechos 1:4-5 está más claro:  
4-En uno de aquellos encuentros les pidió que no se fueran de Jerusalén hasta que, tal como les había dicho, el Espíritu Santo descendiera sobre ellos en cumplimiento de la promesa del Padre.
5-Juan los bautizó con agua- les recordó-, pero dentro de pocos días serán bautizados con el Espíritu Santo.

Esa promesa del Padre que revestirá a los discípulos de “poder desde lo alto” se refiere al derramamiento del Espíritu Santo que ocurrió por primera vez el día de Pentecostés. (Ver Biblia de Estudio de la Vida Plena, pag 1445)

En Hechos 1:8 se mantiene el mismo concepto:
1:8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra.” (Versión Reina Valera, 1960)

1:8 Sin embargo, cuando el Espíritu Santo descienda sobre ustedes, recibirán poder para proclamar con efectividad mi muerte y resurrección ante el pueblo de Jerusalén, en toda Judea, en Samaria y hasta de lo último de la tierra. (La Biblia al Día, 1979)

¿Cuándo recibirían poder los discípulos? Respuesta: Cuando viniera sobre ellos el Espíritu Santo.
A partir de estos textos tenemos dos consideraciones importantes:
1-Los discípulos no habían recibido el Espíritu Santo antes del día de Pentecostés.
2- Está claro que el poder vendría, cuando Dios derramara el Espíritu Santo sobre los discípulos.

El título del capítulo 2 de Hechos es “La venida del Espíritu Santo” porque precisamente describe este evento.

Conclusiones:
1-De acuerdo a estos pasajes de la Biblia se deduce claramente que los discípulos hasta el día de Pentecostés, no habían recibido el Espíritu Santo, porque aún no había descendido sobre ellos.

2-El día de Pentecostés los discípulos recibieron el Espíritu Santo, (la promesa del Padre), y por consiguiente el bautismo del Espíritu Santo, las dos manifestaciones en un mismo momento y por una sola vez.

Esta promesa del derramamiento del Espíritu Santo es para todas aquellas personas que reciben al Señor Jesucristo como Señor y Salvador.

Con respecto a este punto el Apóstol Pedro dijo:
Arrepentíos y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados: y recibiréis el don del Espíritu Santo.
Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare. Hechos 2:38-39


Y en Efesios 1:13 está escrito:
“En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa”.

¡Aleluya, gloria a Dios!


Otras evidencias registradas en la Palabra de Dios que confirman que los discípulos recibieron el Espíritu Santo el día de Pentecostés, las desarrollamos en el próximo artículo:  “La promesa del Espíritu Santo” Parte II


domingo, 17 de mayo de 2015

¿QUÉ DEBO HACER PARA SER SALVO?

Esta pregunta fue hecha por el carcelero de la ciudad de Filipos, siglo I d.C, al apóstol Pablo y a  Silas, su acompañante en el ministerio, Así está escrito en Hechos 16:30-31

30. Señores ¿qué debo hacer para ser salvo?
31. Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y serás salvo, tú y tu casa.

32. Y le hablaron la palabra del Señor a él y a todos los que estaban en su casa.
33. Y él, tomándoles en aquella misma hora de la noche, les lavó las heridas; y en seguida se bautizó él con todos los suyos.
34. y llevándoles a su casa, les puso la mesa; y se regocijó con toda su casa de haber creído a Dios”

Lo más importante para Dios es que todos seamos salvos. Jesucristo dijo:
“Porque no envió Dios a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.”. “De que le sirve al hombre ganar el mundo y perder su alma. O que dará el hombre a cambio de su alma”

Hay algunos principios a tener en cuenta para creer en Cristo.

1-Dios le ama y tiene un plan para su vida
El amor de Dios.
“Porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquél que en Él cree, no se pierda, más tenga vida eterna” (Juan 3:16)

El plan de Dios
(Cristo afirma) Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia. (Una vida completa y con propósito). (Juan 10:10)

La pregunta que surge es: ¿Por qué la mayoría de las personas no están experimentando esta "vida en abundancia"?

2-Porque el ser humano es pecador y está separado de Dios
“Porque todos han pecado y están destituidos de la gloria de Dios” Romanos 3:23
“No hay justo, ni aún uno. No hay quien entienda. No hay quien busque a Dios” Romanos 3:10-11

¿Cuál es la solución a este problema?

3- Jesucristo es la única solución

¿Por qué Jesucristo?

Porque él murió en nuestro lugar
“Más Dios muestra su amor para con nosotros en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros. Romanos 5:8

Porque él resucitó
Este es el evangelio o buenas noticias y se resume en las palabras escritas por el apóstol Pablo:
“Este es el evangelio que asimismo recibí, que Cristo murió por nuestros pecados, fue sepultado, resucitó al tercer día conforme a las Escrituras, apareció a Cefas, y después a los doce y después a más de quinientas personas…” I Corintios 15:3-5

Todo esto es lo que Jesucristo hizo por nosotros. Ahora la pregunta que surge es: ¿Qué debemos hacer nosotros?

4- Debemos, reconocer que somos pecadores, arrepentirnos y recibir a Jesucristo como Señor y  Salvador para conocer y experimentar el amor y el plan de Dios

Debemos recibir a Cristo
“Más a todos los que le recibieron, a los que creen en su nombre, les dio potestad de ser hechos hijos de Dios.” Juan 1:12

Recibimos a Cristo mediante la fe
“Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios; no por obras, para que nadie se gloríe. Efesios 2:8-9

¿Cómo recibimos a Jesucristo?
Recibimos a Cristo por medio de una invitación personal
El te dice: “He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y abre la puerta, entraré a él” Apocalipsis 3:20

La siguiente oración se sugiere como guía:
Señor Jesucristo: Gracias porque me amas y entiendo que te necesito. Gracias porque moriste en la cruz  por todos mis pecados. Te abro la puerta de mi vida y te recibo como mi Señor y Salvador. Haz de mí la persona que tú quieres que sea. Gracias por perdonar mis pecados y darme la vida eterna.” Amen

Esta oración es una guía para una persona que no sabe cómo pedirle a Cristo que entre a su vida.
Nunca hay que sacarla del contexto, es decir sin la debida presentación previa del evangelio. Significa que la persona se arrepiente de sus pecados y que ahora tiene un nuevo amo, que es el Señor Jesucristo, al cual va a obedecer.

LAS PRIMERAS EVIDENCIAS DE QUE UNA PERSONA SE CONVIRTIÓ EN CRISTIANA.

Una vida de fe le capacitará para confiar a Dios cada vez más todo detalle de su vida y para practicar lo siguiente.

Converse con Dios en oración diariamente. (Juan 15:7)
Recurra a la Biblia estudiándola diariamente. (Hechos 17:11)
Concurra a una iglesia donde Jesucristo sea el centro de la predicación y la doctrina cristiana. (Hebreos 10:25)
Testifique otros de Cristo verbalmente y con su vida. (Mateo 4:19 y Juan 15:8)
Obedezca a Dios momento a momento. (Juan 14:21)

Y recuerda que Jesucristo nunca te abandonará porque Él dijo: "No te desampararé, ni te dejaré" (Hebreos 13: 5)

Bendiciones

viernes, 27 de febrero de 2015

OBJETIVOS DEL BLOG

  1. Estudiar las profecías relacionadas con la Segunda Venida de Cristo 
  2. Analizar como impactan en el mundo actual dichas profecías
  3. Utilizar el blog como una herramienta para presentar el evangelio.
  4. Exposición breve de la doctrina cristiana
 
MÉTODO A SEGUIR PARA CUMPLIR EL PROPÓSITO
La metodología para desarrollar el tema consiste en:
  • Establecer un orden en el blog
  • Exposición literal de las profecías bíblicas
  • Interpretación de dichas profecías
  • Exposición del evangelio
ORDEN EN EL BLOG
Hay aproximadamente 500 profecías referidas a la Segunda Venida de Cristo dispersas en todos los libros de la Biblia. En consecuencia es necesario establecer un orden para el análisis de las mismas. En primer lugar, la Biblia está compuesta por 66 libros, de los cuales 39 son del Antiguo Testamento, escritos antes de la Primera Venida de Cristo y 27 del Nuevo Testamento. Fue escrita en un período de 1500 años por 40 autores.

Los pasajes de la Biblia que voy a considerar para el análisis son:

La segunda carta del apóstol Pablo a los Tesalonicenses, capítulo 2 (IITes.2)
El discurso del Señor Jesús en el Monte de los Olivos de Mateo 24 (Mt.24)
Los capítulos 2, 7, 11 y 12 del profeta Daniel (Dn.2, 7, 11-12)
Apocalipsis desde el capítulo 6 al 19 (Ap.6-19)


El Único Camino Seguro
Existen muchas corrientes de pensamientos en este mundo que surgen de ideologías, ya sea de izquierda, de derecha o de centro, pero los cristianos debemos analizarlas a la luz de lo que está escrito en la Palabra de Dios.

La Biblia es la única fuente de revelación que tenemos los cristianos.

Jesucristo dijo “Mi doctrina no es mía, sino del que me envió…”
Con estas palabras dejó expresado claramente que la doctrina cristiana no es una creación humana, sino que es revelación de Dios.

Las palabras, vida y obra de Cristo no se las llevó el viento, quedaron registradas en la Biblia.

El proceso de trasmisión de la doctrina cristiana fue el siguiente: Jesucristo recibió la doctrina de Dios, luego la expuso a los discípulos y estos registraron la vida del Señor y sus palabras en la Biblia. De los manuscritos bíblicos se extrae la doctrina cristiana.

Puntos principales de la doctrina cristiana establecida en los concilios.

Jesucristo es Dios, murió por nosotros, resucitó y va volver otra vez.

Por todo esto, es necesario reconocer que somos pecadores, arrepentirnos y recibir a Cristo como Señor y Salvador para arreglar ya, nuestras cuentas con Dios. 

SEÑALES ANTES DEL FIN

El Señor Jesús en su discurso en el Monte de los Olivos nos exhortó a prestar atención a las señales que nos indican que su Segunda Venida es inminente.

“Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención esta cerca” Lucas 21:24

“De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando veáis todas estas cosas, conoced que está cerca, a las puertas. De cierto os digo, que no pasará esta generación hasta que todo esto acontezca. El cielo y la tierra pasarán, pero mis palabras no pasarán” Mateo 24:32-35

El surgimiento del Estado Islámico en el escenario mundial marca un punto de inflexión en la Historia de la Humanidad. Asistimos horrorizados al espectáculo de la masacre de personas, esperando que la comunidad internacional intervenga y le encuentre una solución al problema. Es como si “la maldad” se hubiera instalado en el mundo. Todo va a ser distinto a partir de ahora, hay un antes y un después del Estado Islámico que llegó para quedarse.

Sin embargo este hecho es el cumplimiento de una señal clave en el panorama profético.
En el siglo VI a.C, el profeta Zacarías predijo acerca del establecimiento de “la Maldad” en un lugar en el mundo. ¿Cuál va a ser ese lugar qué va a alojar este mal? Está escrito:

Zacarías 5:5-11
Y salió aquel ángel que hablaba conmigo, y me dijo: Alza ahora tus ojos, y mira qué es esto que sale. Y dije: ¿Qué es? Y él dijo: Este es una efa que sale. Además dijo: Esta es la iniquidad de ellos en toda la tierra. Y he aquí, levantaron la tapa de plomo, y una mujer estaba sentada en medio de aquel efa.
Y él dijo: Esta es la Maldad; y la echó dentro del efa, y echó la masa de plomo en la boca del efa.

Alcé luego mis ojos, y miré, he aquí dos mujeres que salían, y traían viento en sus alas, y tenían alas como de cigüeña, y alzaron el efa entre la tierra y los cielos.

Dije al ángel  que hablaba conmigo. ¿A dónde llevan el efa? Y él me respondió;Para que le sea edificada casa en tierra de Sinar; y cuando esté preparada lo pondrán sobre su base.

Según este texto, el territorio que va a alojar la “Maldad” va a ser Sinar (i.e., Babilonia) o sea el Irak y Siria de hoy.
He aquí delante de nuestros ojos, 2600 años después de escrito se cumplió la profecía de Zacarías porque el Estado Islámico allí edificó su casa. 

Por otro lado el apóstol Juan predijo a fines del siglo I, después de Cristo, que al final de los tiempos iba a surgir un personaje siniestro que decapitará a los cristianos durante el período de la gran tribulación. Ap 20:4
Como todos podemos observar la predicción de Juan ya se está cumpliendo. Este hecho constituye otra señal.

Frente a este caos general, ¿Cuál es nuestra única esperanza? Respuesta: Jesucristo

“Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención esta cerca” Lucas 21:24

Aunque el mundo se ponga triste y con temor por el cumplimiento de señales tan lamentables como éstas, los cristianos en cambio debemos levantar nuestras cabezas porque en cualquier momento el Señor Jesús viene a buscarnos.

Para que Él te pueda llevar, primero tienes que invitarle a entrar a tu vida.
En Apocalipsis 3:20 dice así:
“He aquí yo estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi vos y abre la puerta, entraré a él, y cenaré con él, y él conmigo”

¿Qué estás esperando para abrirle la puerta de tu corazón para que Él sea tu Señor y Salvador?

Maranata: Cristo viene pronto

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